Bartolomé Menchén comenzó su exposición mostrando que los documentos de la Iglesia apuestan por la recuperación de los elementos esenciales de la antropología humana. En estos elementos se fundamenta la capacidad del ser humano para relacionarse con Dios.
La novedad del planteamiento del Dr. Menchén es que en los niños esos elementos se muestran con una gran claridad. La fe de los niños, su sencillez, su espontaneidad en el trato, su asombro ante la realidad, su confianza en sus padres son elementos que permiten hablar de una antropología infantil. Esas cualidades se oscurecen en el adulto, por lo que son más difíciles de estudiar.
Esta antropología infantil, ese descubrir la esencia del ser humano en lo que vemos en los niños, es la base de su método catequético. Es lo que denomina catequesis familiar.
La catequesis familiar se realiza en tres sesiones, una con los padres, otra con los hijos y otra entre padres e hijos en su hogar. En la sesión con los padres se les explica en profundidad las cuestiones y actividades que pueden realizar con sus hijos. En la sesión con los hijos se realiza alguna actividad sencilla y se les da la ficha que han de rellenar preguntándole a los padres. Por último, en el hogar, los hijos preguntan a los padres, que se convierten así en los mejores catequistas de sus hijos. Las ventajas de este método es que favorece la relación con los hijos y la implicación de los padres en el proceso formativo. De hecho, se dan casos en que los padres desean continuar o repetir de nuevo las catequesis porque les resultan muy interesantes. Este método se ha aplicado en Sevilla y Málaga con unos excelentes resultados.
La novedad del planteamiento del Dr. Menchén es que en los niños esos elementos se muestran con una gran claridad. La fe de los niños, su sencillez, su espontaneidad en el trato, su asombro ante la realidad, su confianza en sus padres son elementos que permiten hablar de una antropología infantil. Esas cualidades se oscurecen en el adulto, por lo que son más difíciles de estudiar.
Esta antropología infantil, ese descubrir la esencia del ser humano en lo que vemos en los niños, es la base de su método catequético. Es lo que denomina catequesis familiar.
La catequesis familiar se realiza en tres sesiones, una con los padres, otra con los hijos y otra entre padres e hijos en su hogar. En la sesión con los padres se les explica en profundidad las cuestiones y actividades que pueden realizar con sus hijos. En la sesión con los hijos se realiza alguna actividad sencilla y se les da la ficha que han de rellenar preguntándole a los padres. Por último, en el hogar, los hijos preguntan a los padres, que se convierten así en los mejores catequistas de sus hijos. Las ventajas de este método es que favorece la relación con los hijos y la implicación de los padres en el proceso formativo. De hecho, se dan casos en que los padres desean continuar o repetir de nuevo las catequesis porque les resultan muy interesantes. Este método se ha aplicado en Sevilla y Málaga con unos excelentes resultados.
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